Parientes
10.09.2024
Los dolores anuncian el parto. Acompañan
a la vida que viene empujando y resuena
por latidos y acordes del aire, propensa
a crecer deshaciendo las duras membranas.
Irrumpiendo respira a la hora acordada.
En la sala reunidos los suyos celebran
el feliz nacimiento, que al fin la promesa
los visite trayendo consigo esperanza.
Ensanchados de vida, contemplan alegres
el milagro; reunidos comparten sonrisas
y derraman el llanto sublime del gozo.
Tejerán el cordón que los hace parientes,
conociendo el poder del amor por la estima
al saber que regresan de nuevo los rostros.