Descripción del paisaje
Donde las gotas de lluvia humedecen las hojas de los castaños, la nostalgia de lo que no pudo ser convoca la soledad del bosque, a su alrededor va tejiendo un manto de niebla.
Y se vuelve difícil ver la cumbre, lo atrapa a uno el desengaño.
Aun si por la fuente corre el agua y canta, lejano, el ruiseñor, me resulta imposible recuperar la ilusión por aquello que tanto quise y no pudo ser.
Aun si escampa, no atino a caminar. La derrota abre surcos, entierro pedazos de mi corazón.
Hace un mes estuve con la mujer que tanto quise, aquí mismo. Aparecía feliz el paisaje viéndonos caminar, por el bosque, hasta que llegamos a la cumbre.
Al lado de la cruz, incliné la cabeza; buscaba sus labios, pero ella tan escurridiza, trepando a las nubes, esquivó el beso.